Una enfermedad endocrina en la que una persona desarrolla una acción insuficiente de la hormona insulina en el cuerpo se llama diabetes mellitus. El síntoma principal de esta enfermedad es la hiperglucemia. Este término se refiere a niveles de azúcar en sangre crónicamente elevados. Como resultado, el paciente desarrolla intolerancia a la glucosa. Como resultado, se desarrolla una deficiencia de insulina o la eficacia de su acción se reduce significativamente.
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La enfermedad no se puede curar por completo, por lo que el paciente deberá someterse a un tratamiento de por vida. Si sigue estrictamente todas las recomendaciones de un especialista, con dicho diagnóstico podrá vivir una vida larga y plena.
Los especialistas distinguen dos tipos principales de la enfermedad. Tras averiguar cuál de ellos molesta a una persona, los médicos determinan cómo curar la diabetes. La enfermedad de tipo 1 se desarrolla cuando el páncreas del paciente deja de producir insulina. Este trastorno aparece con mayor frecuencia en niños y jóvenes menores de 30 años. Las causas predominantes pueden ser las siguientes:
Los investigadores también han descubierto que los negros tienen 5 veces más probabilidades de desarrollar diabetes que los caucásicos. Esta estadística no es relevante para la diabetes de tipo 2. Se produce cuando el paciente tiene una producción insuficiente de insulina o disfunciones en su acción. Este tipo de enfermedad se refiere a la relacionada con la edad. Lo más frecuente es que aparezca debido a:
Además, la probabilidad de padecer la enfermedad aumenta a partir de los 40 años. Se considera que el factor más importante en el desarrollo de la diabetes mellitus es la herencia. Si los parientes cercanos padecen este problema, existe una alta probabilidad de que otros miembros de la familia también la padezcan.
Si alguien cercano a usted padece o ha padecido diabetes de tipo 1, corre un mayor riesgo de padecerla. Además, la diabetes de tipo 2 tiene más probabilidades de desarrollarse en personas con sobrepeso y que no hacen ejercicio.
La enfermedad es incurable, pero con una medicación adecuada y regular, el paciente puede sentirse muy bien. La terapia para la diabetes debe tratarse como un cambio en el estilo de vida. No limita al paciente en modo alguno, le permite trabajar, hacer sus cosas favoritas y ser un miembro absolutamente pleno de la sociedad. El tratamiento de la diabetes implica:
Además, el paciente también puede necesitar ayuda psicológica. Ésta le permite aceptar más rápidamente su enfermedad y mejorar su calidad de vida. En la diabetes debe prestarse especial atención a una nutrición adecuada. La dieta debe observarse estrictamente, sin permitir interrupciones. El paciente debe negarse por completo a consumir:
La dieta terapéutica es prescrita al paciente por un especialista. Éste especificará exactamente qué alimentos pueden comerse y cuáles están estrictamente contraindicados. Puede ser muy angustioso para los pacientes diabéticos tener que renunciar por completo a los dulces. Sin embargo, es importante saber que se ha creado un gran número de edulcorantes para las personas con este diagnóstico. Hoy en día, la fructosa, la sacarina, el sucrasito o el aspertamo se utilizan para producir diversos dulces para diabéticos, como chocolate, galletas, pasteles y zumos.
Puede prevenir el desarrollo de esta enfermedad vigilando su dieta. Este es el punto más importante en la prevención de la diabetes mellitus. Se debe dar preferencia a los alimentos vegetales y limitar el uso de productos de harina. Si una persona tiene un riesgo de diabetes, por ejemplo, si sus familiares sufren de tal enfermedad, entonces es deseable que abandone por completo el azúcar granulado. Este producto supone una grave carga para el páncreas. Se debe dar preferencia a:
También se recomienda incluir en la dieta los siguientes alimentos: nueces, judías, hierbas, pimientos dulces, cítricos, colinabo, tomates. También merece la pena prestar especial atención a la observancia del equilibrio hídrico. Esto es importante, porque la asimilación de la glucosa requiere no sólo la hormona insulina, sino también líquido. Para no provocar la deshidratación del organismo, cada persona debe beber alrededor de 1,5 litros de agua al día. Sin embargo, bebidas como los refrescos, el café, el alcohol y el té no reponen el equilibrio hídrico del organismo.
Evitar el estrés es un método eficaz para prevenir la diabetes y muchas otras enfermedades. Limite los contactos con personas que le resulten desagradables, controle su estado emocional, evite el nerviosismo y la depresión. Estas tensiones pueden agravar el curso de cualquier enfermedad existente, además, pueden provocar el desarrollo de otras enfermedades, incluyendo la diabetes.
Los científicos llevan mucho tiempo trabajando en la cura de esta enfermedad. Aún no han encontrado respuesta a la pregunta de cómo curar la diabetes en casa, pero la investigación ya está dando sus primeros frutos. Por ejemplo, especialistas del Instituto de Massachusetts han anunciado el lanzamiento de un fármaco que podría mejorar notablemente la calidad de vida de los pacientes con diabetes de tipo 1.
Según los científicos, una administración de este fármaco puede sustituir a un ciclo diario de inyecciones de insulina. El fármaco se administra una vez al día. La insulina se activa en el momento en que el organismo la necesita. En la actualidad, prosiguen los ensayos del fármaco. Si se completan con éxito, este fármaco podría suponer una auténtica revolución en el tratamiento de la enfermedad. Sin embargo, la búsqueda de un fármaco que ayude a los pacientes de diabetes a curarse por completo sigue en marcha.